El sobrepeso, se entiende como un peso corporal mayor al ideal. Si es moderado, no precisamente se considera como obesidad, especialmente en personas fornidas o de huesos grandes, mayormente el sobrepeso cuando esta en un grado muy alto, puede causar estragos en la salud a largo plazo.
Sobrepeso.
Una parte cada vez mayor de la población a nivel mundial posee sobrepeso y las dificultades de salud relacionadas a esta condición esta aumentando rápidamente. La efectividad a largo plazo de los programas y productos dietéticos para combatir el sobrepeso hoy en día es inexacta.
El sobrepeso, que no debe confundirse con la obesidad, a pesar de estar relacionados, es una acumulación de grasa corporal que esta fuera del nivel normal de peso de un individuo, que corrientemente es causada por una alta ingesta de calorías que el cuerpo no consigue quemar. El exceso de calorías se acumula como grasa, o tejido adiposo.
¿Qué es?
El sobrepeso se entiende específicamente como un aumento en el peso de una persona, el cual tiende a ser mayor al 20% del peso corporal estándar del mismo, según lo establecen ciertos factores, como la edad, la altura y el género. Tener un peso correcto esta muy ligado con poseer un menor riesgo en el deterioro de la salud.
Basados en los factores anteriores, el sobrepeso podría definirse como un aumento de peso mayor del 15 al 20 por ciento, sobre el peso corporal estándar de una persona según su estatura y edad. No obstante, hoy en día, las definiciones del sobrepeso se basan primariamente en medidas de estatura y peso, y no en proporción.
Estas medidas se manejan para definir un número conocido como índice de masa corporal (IMC). Este dígito, que es primordial para establecer si un individuo posee o no sobrepeso u obesidad, sin embargo, no es una medida exacta de la grasa corporal.
Los parámetros de los números de IMC se pueden agrupar en varias categorías, como lo son el bajo peso, peso sano, sobrepeso y obesidad, que se concuerdan por edad y sexo; por ejemplo, un IMC entre 25.0 y 29.9 corresponde a tener sobrepeso y 30.0 y más con obesidad.
La obesidad mórbida, asimismo conocida como obesidad desarrollada o severa, se define como un IMC de 40.o mayor. (Ver artículo: Dieta hipercalorica).
El peso corporal está afectado por la interacción de variados factores. Existe una fuerte evidencia de que la genética familiar puede afectar la acumulación de grasa, y por ende, el sobrepeso tiende a darse fácilmente en ciertas familias.
No obstante, el rápido aumento de la obesidad en las poblaciones de todo el mundo, desde la década de 1980, se ha dado a una velocidad, a la que las alteraciones genéticas se incorporan regularmente en las localidades con gran progresión.
Conjuntamente, existe un rápido aumento del peso corporal en varias partes del planeta, donde el sobrepeso casi no existía y hoy en día es un problema común en las comunidades. Según la Organización Mundial de la Salud, que definía el sobrepeso global como una epidemia, en 2016 más de 1.800 millones de adultos mayores de 18 años en toda la tierra, tenían sobrepeso y 650 millones, que simbolizan el 13 por ciento de la población adulta internacional, eran obesos.
Características del Sobrepeso
El sobrepeso se define como un trastorno nutricional que esta presente en distintas partes del mundo actual, principalmente en países desarrollados como los Estados Unidos y Reino Unido. La fisiología de los obesos y su facilidad de padecer enfermedades crónicas, han tenido un amplio interés en los últimos años, y una amplia serie de información ha empezado a acumularse en la web sobre el tema.
El sobrepeso en si, es un desequilibrio corporal. Cuando se ve en el sentido más extenso, se ha estimado como un trastorno del gasto energético. El desarrollo del sobrepeso en los seres humanos es de causa compleja, e involucra una serie de causas tanto genéticas, como ambientales, que posteriormente se convierten en procesos metabólicos complicados y difíciles de tratar.
La persistencia del sobrepeso y la obesidad en una población depende de varios factores en particular, pero también tienen mucho que ver con el estándar de peso que se presenta en la región geográfica o país, ya que cada nación puede tener un peso, que quizás en otra, no se considera como adecuado.
La tendencia a desarrollar sobrepeso en los adultos ha sido normal a lo largo de la historia, sin embargo, hoy en día también esta presente en los niños. Las personas con sobrepeso poseen un mayor riesgo de padecer enfermedades como, hipertensión arterial, diabetes, y cáncer.
Es preciso determinar cual es el grado de sobrepeso, que puede llevar a un futuro riesgo en la salud del individuo. El sobrepeso posiblemente favorece en mayor o menor grado a la morbilidad en sociedades de poco desarrollo, porque el peligro de las enfermedades crónicas más habituales es de otros tipos que no tienen relación con el peso corporal.
Al delimitar el sobrepeso y la obesidad, debe reflexionarse el tema de la morbilidad, así como la mortalidad. La obesidad es una de las principales enfermedades que desencadenan otro tipo de riesgos, que pueden hasta causar la muerte.
En la actualidad, la cifra de personas con sobrepeso en los países industrializados se ha elevado elocuentemente, tanto que la Organización Mundial de la Salud, ha nombrado como «enfermedad» a la obesidad. En los Estados Unidos, el 69% de la población adulta posee sobrepeso o es obesa.
En los países que se consideran potencias mundiales, los datos de encuestas revelan que el 40% de los hombres y el 27% de las mujeres poseen sobrepeso, y el 20% de los hombres y el 17% de las mujeres son obesos.
Las personas obesas poseen un riesgo mucho mayor de padecer trastornos graves en la salud, como presión arterial alta, ataques cardíacos, incidentes cerebrovasculares, diabetes, enfermedad de la vesícula biliar y numerosos tipos de cáncer, todo esto se desarrolla con mas facilidad en las personas que poseen un sobrepeso.
Síntomas
Poseer un poco de sobrepeso consigue no originar diversos problemas notables. No obstante, una vez que esta en la etapa de tener sobrepeso, es posible que se empiecen a desarrollar síntomas que dificulten su vida diaria. La obesidad puede producir problemas de salud cotidianos, como:
- Problemas para respirar.
- Acrecentamiento de la sudoración.
- Jadeos
- Incapacidad para realizas movimientos físicos rápidos.
- Estar muy cansado todos los días.
- Dolencias de espalda y articulaciones.
- Baja autoestima y confianza.
- Sentirse aislado.
El sobrepeso asimismo puede originar cambios que quizás no note, pero que consiguen dañar de forma grave su salud, como la presión arterial alta o hipertensión, así como tener altos niveles de colesterol. Ambas situaciones aumentan rápidamente su riesgo de tener una enfermedad cardiovascular, como:
- Enfermedad cardíaca coronaria, que logra acarrear a un ataque cardíaco.
- Accidentes cerebrovasculares que puede producir una discapacidad futura la cual podría ser grave.
Otro inconveniente a largo plazo que consigue afectar a las personas obesas es la diabetes tipo 2. Se aprecia que poco menos de la mitad de todos los casos de enfermedad está correspondido con la obesidad. Los primordiales síntomas de la diabetes son:
- Siempre tener mucha sed.
- Ir al baño seguido, principalmente de noche.
- Cansancio extremo.
La obesidad puede favorecer a diversas afecciones crónicas, como ciertos cánceres, asma, dificultades de espalda, dolencia renal crónica, alucinación, enfermedad de la vesícula biliar y osteoartritis. El sobrepeso u obesidad asimismo se relaciona con la muerte prematura.
Los riesgos de salud relacionados con la obesidad son:
- Trastornos respiratorios.
- Diversos tipos de cáncer.
- Padecimiento de la arteria coronaria o corazón.
- Depresión.
- Diabetes
- Dolencia de la vesícula biliar o del hígado.
- Dolencia por reflujo gastroesofágico.
- Alta presión sanguínea.
- Colesterol elevado.
- Enfermedad de las articulaciones.
Las personas con sobrepeso usualmente tienen los síntomas y las condiciones médicas que se nombraron anteriormente. La presión arterial alta, los niveles elevados de colesterol, los problemas respiratorios y el malestar en las articulaciones, principalmente en las rodillas o en la parte menor de la espalda, son los más comunes. Cuanto más obesa es una persona, más posible es que tenga problemas médicos relacionados con la obesidad. (Ver artículo: Dieta de 3000 calorías).
Causas del Sobrepeso
En las capitales Europeas y otras ciudades similares, diversos estudios con respecto al genoma humano, los cuales son un conjunto de genes que se pueden encontrar en los cromosomas, han revelado particularidades genéticas en pequeñas cantidades de personas, que hace que tiendan a padecer obesidad mórbida, la cual empieza en la infancia o también puede desarrollarse cuando alcanzan una edad avanzada
Se realizo un estudio donde se implicaron individuos que padecen una deleción cromosómica (mutación genética), que correspondió a 30 genes, de un subconjunto de sujetos con obesidad severa, cuya condición se había manifestado en la infancia. En este análisis se diagnostico que al menos el 1% de la población estudiada, padece o padecería de obesidad mórbida, y que en este proceso las hormonas que mas relacionadas estaban son la leptina y la insulina, que regulan el apetito y el metabolismo de la glucosa en el cuerpo.
El desorden de estas hormonas se relaciona con la sobre alimentación o retención de calorias, y con la resistencia de los tejidos a la insulina, lo que acrecienta el riesgo de padecer diabetes tipo II. La caracterización de los defectos anatómicos en personas afectadas por obesidad mórbida ha establecido que, al menos para ciertos individuos, esta enfermedad se debe a una causa hereditaria.
No obstante, para la gran parte de las personas afectadas por el sobrepeso, las causas de su afección son más complicadas e implican la interacción de varios factores.
De hecho, el rápido acrecentamiento de la obesidad en todo el mundo posiblemente se deba a cambios significativos en los factores ambientales y cambios en la conducta en lugar de un cambio demostrativo en la genética humana. Por ejemplo, los patrones de nutrición temprana que puede inculcar una madre con sobrepeso, pueden tener un papel importante en la figura cultural, en lugar de genética.
Las causas esenciales de la obesidad infantil son complicadas y no se perciben por completo, pero está claro que los niños se tornan obesos cuando comen excesivamente y hacen poco ejercicio. Asimismo, muchos niños toman malos hábitos alimenticios, y prefieren comer bocadillos azucarados y poco sanos en lugar de frutas y verduras sanas.
La falta de ejercicio para quemar calorías asimismo ha desempeñado un papel significativo en la contribución a la obesidad infantil. En 2005, una investigación reveló que los niños en distintas partes del mundo, de 8 a 18 años de edad pasaban un promedio de alrededor de cuatro horas al día viendo televisión y vídeos y dos horas añadidas jugando videojuegos y utilizando computadoras.
Consecuencias
La obesidad puede ser desfavorecedora desde un sentido estético, principalmente en partes del mundo donde la delgadez es la tendencia popular entre los habitantes, pero aparte de ser poco grato para la vista, no deja de ser un problema médico grave.
En general, las personas obesas poseen una esperanza de vida más corta; ya que continuamente sufren una gran cantidad de enfermedades, en comparación con las personas de peso normal.
Por ejemplo, las personas obesas son frecuentemente perturbadas por la diabetes; de hecho, en todo el mundo, cerca del 90% de los casos de diabetes tipo II son producidos por la desproporción de peso. (ver: artículo Desnutrición )
La obesidad es de igual forma una causa significativa de cáncer; en 2018, el sobrepeso y la obesidad fueron la causa de aproximadamente 1 de cada 25 cánceres diagnosticados en todo el mundo.
La relación que se encuentra entre la obesidad y el deterioro de la salud cardiovascular, se muestra en situaciones como la diabetes y la hipertensión, colocando a las personas obesas en peligro de un padecimiento cognitivo futuro apresurado.
Las indagaciones sobre el tamaño del cerebro en personas con obesidad a largo plazo revelaron que el acrecentamiento de la grasa corporal está relacionado con la atrofia del tejido cerebral, especialmente en los lóbulos temporales del cerebro.
Efectivamente, tanto el sobrepeso como la obesidad, y consecuentemente un IMC de 25 o más, están relacionados con reducciones de la corteza cerebral, lo que acrecienta el riesgo de demencia, la representación más habitual de las cuales es el padecimiento de Alzheimer.
Las mujeres obesas frecuentemente se ven afectadas por la infertilidad, por lo que tardan más en concebir que las mujeres de peso normal, y las mujeres obesas que resultan embarazadas poseen un mayor riesgo de aborto espontáneo.
Los hombres obesos asimismo poseen un mayor riesgo de problemas de fertilidad, ya que la desproporción de grasa corporal se relaciona con una depreciación de los niveles de testosterona.
En relación con las personas de peso normal, las personas obesas poseen más posibilidades de morir tempranamente por enfermedades degenerativas en el corazón, las arterias y los riñones, y ademas poseen un mayor riesgo de desarrollar cáncer.
Las personas obesas de igual manera poseen un mayor riesgo de muerte por accidentes y padecen altos riesgos terapéuticos . La salud mental también se ve afectada. Las variaciones de conducta en las personas obesas, que van desde la timidez y la agresividad, hasta una personalidad demasiado animosa, pueden estar relacionadas con trastornos como la neurosis y psicosis.
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Clasificación del Sobrepeso
Las etapas de peso están precisadas médicamente por el índice de masa corporal, mejor conocido como IMC.
- Los individuos con un IMC de 25 a 29.9 se catalogan clínicamente como «sobrepeso».
- Los individuos con un IMC de 30 a 39.9 se catalogan como afectadas por la obesidad.
- Los individuos con un IMC de 40 o más se catalogan como afectadas por obesidad grave.
El IMC no se utiliza para establecer el porcentaje real de grasa corpórea de una persona, pero es un buen método para categorizar el peso en métodos de lo que es saludable y no sano. El IMC se deduce dividiendo el peso de un individuo en kilogramos por su altura en metros.
Una vez que halle su medida, querrá descubrir la clasificación de peso que esta predispuesta en la tabla o calculadora de IMC. Conocer su IMC es un buen punto de partida para empezar a corregir tu peso.
Si halla que está en un rango poco sano, querrá hablar con su médico para solucionar este problema. No existe una tabla de IMC diferente para hombres y mujeres. Ambos sexos utilizan la misma tabla para calcular la obesidad. Además, las mismas categorizaciones de obesidad se emplean tanto a hombres como a mujeres.
Grado 1
La obesidad de grado 1 se considera como de bajo riesgo, con un IMC de 30 a 34,9. El sobrepeso tipo 1 es una enfermedad crónica que aparece cuando coexiste un número no muy elevado de grasa en el cuerpo.
Apartando a las personas que son muy musculosas, aquellas cuyo peso permanece en un 20% o más del punto medio de la escala de peso, según la escala de masa corporal estándar, están se consideran como personas con con sobrepeso.
Grado 2
La obesidad de grado 2 se considera de riesgo moderado, con un IMC es de 35 a 39,9. El sobrepeso tipo 2 es la situación en la que el peso del individuo excede del estándar de la población en correspondencia al sexo, medida y somato-tipo.
Grado 3
La obesidad de grado 3 se considera de alto riesgo y se conoce comúnmente como obesidad mórbida, con un IMC similar o mayor a 40. La obesidad mórbida u obesidad grave, es el término para la obesidad definida por un índice de masa corporal muy alto.
Aquí puede existir la presencia de al menos una enfermedad característica o incapacidad grave y minusvalía a raíz del exceso de peso. La obesidad mórbida, la cual puede reducir la expectativa de vida de una persona, causa incapacidad, minusvalía y dificultades de supresión social. ( ver: artículo Batidos para ganar masa muscular)
Tipos de Sobrepeso
La discrepancia entre los términos clínicos de «sobrepeso» y «obesidad» dependen exclusivamente del índice de masa corporal. Los expertos en obesidad tienden a variar en cuanto a la cantidad de tipos de obesidad que existen, pero una cosa en la que están de acuerdo, es que no existe un solo tipo de sobrepeso.
Un intelectual, el Dr. Lee Kaplan, Director del Colegio de Obesidad, Metabolismo y Nutrición del Hospital de Massachusetts, dijo en una entrevista, que hasta el momento han enumerado 59 tipos de obesidad diferentes.
Dado que ahora se han manifestado más de 25 genes con lazos con la obesidad, tal vez no sea extraordinario que haya muchos tipos diferentes de sobrepeso con los que luchar. El gen FTO ha sido reconocido en los últimos años por poseer una asociación concluyente con la obesidad, pero otros pueden jugar un papel similar.
Inclusive se ha identificado un lazo genético con la tendencia a comer de forma descomunal. Un estudio, divulgado en el Journal of Public Health en 2015, notificó que existen al menos seis tipos distintos de obesidad.
Los investigadores manejaron esta información para precisar grupos de personas con obesidad que compartían tipologías habituales más allá del IMC. Al hacerlo, llegaron a la determinación de que había pruebas capaces de identificar los subsecuentes seis subgrupos, todos con un IMC de 30 o mayor:
- Hombres que ingieren mucho alcohol.
- Mujeres jóvenes y sanas.
- Ancianos sanos.
- Ancianos corporalmente enfermos pero aptos.
- Personas desdichadas, de mediana edad.
- Personas son estado de salud grave.
Hay varios grupos diferentes de personas con sobrepeso y estas diferencias dentro de las personas obesas, se desarrollaron sugiriendo, que registrar estas diferencias puede poseer repercusiones importantes para las decisiones clínicas y las decisiones destinadas a atacar y tratar la obesidad, ya que es probable que no funcione la misma metodología para distintos tipos de obesidad.
https://www.youtube.com/watch?v=6F-ALbiB_LY
Mórbida
La obesidad es un inconveniente de salud cada vez mayor. A medida que aumenta el número de personas con sobrepeso y obesidad, asimismo aumenta el número de obesos graves o mórbidos.
La obesidad mórbida es una situación de salud grave que deriva de un índice de masa corporal irregularmente alto. Una persona con obesidad mórbida consigue tener conflictos para realizar las funciones diarias, como marchar y respirar, y posee un mayor riesgo de tener muchas complicaciones de salud. (ver artículo: Dieta Hiperproteica)
En hipótesis, cualquiera puede tornarse obeso mórbido. Para que alguno gane peso y se categorice en obesidad mórbida, debe retener más calorías de las que su cuerpo consigue quemar y utilizar.
El cuerpo almacena las calorías sobrantes en forma de grasa. A medida que se consuman más y más calorías, las reservas de grasa se vuelven más grandes, lo que conlleva a la obesidad o, en el peor de los casos, a la obesidad mórbida.
La obesidad mórbida es cuando un individuo posee cantidades altas grasa corpórea y un índice de masa corporal o IMC mayor a 35. El IMC es una valoración que ayuda a los médicos y otros expertos médicos a decretar si un individuo está dentro de un rango de peso saludable.
Ciertos médicos consideran que una persona posee obesidad mórbida si su IMC no supera los 35, pero poseen más de 50 kg de sobrepeso. Un individuo puede ser obeso sin tener específicamente obesidad mórbida. Una persona que es obesa posee un IMC de 30 o más. No obstante, una persona obesa posee una mayor posibilidad de padecer:
- Diabetes
- Dolencias del corazón.
- Alta presión sanguínea.
- Artritis
- Ciertos canceres.
La obesidad mórbida acontece cuando una persona consigue un nivel de obesidad que promueve ampliamente las posibilidades de padecer una de estas situaciones. Estas condiciones frecuentemente se conocen como morbilidades y son los que causan estas incapacidades o inclusive la muerte.
Hormonal
Las hormonas son elementos químicos que regulan los procesos en nuestro cuerpo, y las mismas pueden ser las causantes de la obesidad. Las hormonas leptina e insulina, las hormonas sexuales y la hormona de crecimiento intervienen en nuestro apetito, asimilación, que es la velocidad a la que nuestro cuerpo quema grasa para obtener energía, y la repartición de la grasa corporal. Las personas obesas poseen niveles de estas hormonas que incitan a un metabolismo anormal y la acumulación de grasa corporal.
Un sistema de glándulas, acreditado como sistema endocrino, secreta hormonas en el torrente sanguíneo. El sistema endocrino trabaja con el sistema nervioso y el sistema inmunológico para ayudar a nuestro cuerpo a afrontar distintos eventos y enfermedades.
Un déficit en las hormonas puede llevar a la obesidad y, por otro lado, la obesidad puede acarrear a cambios en las hormonas. La hormona leptina es originada por las células grasas y se secreta en nuestro torrente sanguíneo.
La leptina disminuye el apetito de una persona al actuar en partes concretas de su cerebro para reducir su necesidad de comer. También parece controlar cómo el cuerpo manipula su acumulación de grasa corporal.
La insulina, es una hormona originada por el páncreas, es significativa para la regulación de los carbohidratos y el metabolismo de las grasas. La insulina provoca la captación de glucosa de la sangre en tejidos como los músculos, el hígado y la grasa. Este es un asunto significativo para asegurarse de que haya energía aprovechable para el funcionamiento diario y para conservar niveles normales de glucosa en correcto tránsito.
La distribución de la grasa corporal juega un papel importante en el desarrollo de enfermedades relacionadas con la obesidad, como enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y ciertas formas de artritis.
La grasa que esta en nuestro abdomen es un elemento de mayor riesgo de enfermedades que la grasa acumulada en la parte inferior, las caderas y los muslos. Aparentemente, los estrógenos y los andrógenos son los que deciden la repartición de la grasa corporal. Los estrógenos son hormonas sexuales originadas en los ovarios de las mujeres. Son las que estimulan la ovulación en cada período menstrual.
Muscular
Actualmente llevar demasiados kilos es una señal sólida de dificultades de salud actuales o futuras. Pero no para todos, ya que algunas personas que poseen sobrepeso u obesidad se escapan de los peligros tradicionales, al menos transitoriamente.
Este subgrupo de peso inclusive ha ganado su adecuado nombre: sobrepeso metabólicamente saludable o muscular. La obesidad muscular no es habitual. El hecho de que un individuo tenga obesidad metabólicamente sana en un instante dado, podría no seguir siendo así.
El exceso de peso puede perjudicar las articulaciones de la rodilla y la cadera, inducir apnea del sueño y problemas respiratorios, y favorece al desarrollo de diferentes tipos de cáncer. Los genes positivamente tienen un papel en la forma en que el cuerpo y el metabolismo de una persona reconocen al peso. Ciertas personas pueden tener una ventaja genética contra el desarrollo de resistencia a la insulina.
Otros están propensos genéticamente para acumular grasa en las caderas o los muslos, que es menos metabólicamente delicado que acumular grasa junto al abdomen. El concepto de obesidad muscular podría utilizarse para ayudar a guiar el tratamiento. Actualmente el ejercicio y una dieta saludable son la base para tratar la obesidad.
Cuando esos esfuerzos no son capaces, la cirugía para disminuir el peso, a veces es una elección. Tal cirugía es adaptada para personas con obesidad metabólicamente nociva, aseguran los autores, pero para personas con obesidad metabólicamente saludable podría tener más sentido aumentar el enfoque de un estilo de vida sano, en lugar de someterse a una cirugía.
Leve
El hecho de tener sobrepeso, se puede ver al tener un IMC bastante elevado, y se relaciona con un mayor riesgo de tener enfermedades futuras. Si bien la obesidad aumenta bastante el riesgo de muerte, y la humanidad junto con expertos médicos recientemente han colocado un gran énfasis en conservar un peso corporal «estándar» o ideal, el riesgo para la salud que tiene el sobrepeso, no esta tan claro todavía para las personas en el mundo.
La gran parte de las cirugías para quitar peso se consuman en pacientes con obesidad mórbida, pero una nueva indagación insinúa que una opción quirúrgica puede ser un método seguro y eficaz para las personas que poseen mucho menos peso que los mórbidos.
Las personas que tienen sobrepeso no deben alarmarse por esto, a menos que posean otros indicadores de mala salud y que noten que esto afecte su vida diaria. Pero sobre todo, poseer kilos de mas y volverse más que levemente obeso, sigue siendo delicado.
Durante décadas, los expertos en salud han notificado sobre los peligros de poseer sobrepeso, lo que revela un mayor riesgo de varias afecciones, como malestares cardíacos, derrames cerebrales, diabetes y ciertos tipos de cáncer.
Pero varios estudios han manifestado, que a veces el sobrepeso, inclusive la obesidad, puede ser ventajosa, fundamentalmente en personas mayores. Este fenómeno se conoce como la paradoja de la obesidad. Un estudio reciente dice que las personas con sobrepeso u obesidad leve viven más tiempo que las personas de peso estándar, pero los críticos reprochan algunas de estas terminaciones.
Sobrepeso emocional
Todos hemos pasado por momentos en que las emociones nos dominan, es posible que lo hayamos admitido algunas veces y otras no, sin embargo existen personas que estos desordenes emocionales, les han causado el sobrepeso, ya que usualmente cuando estamos tristes, comemos mas. Todo este tipos de traumas o procesos emocionales pueden causar el sobrepeso.
A pesar del impacto que tengan las emociones sobre nuestro peso, siempre tenemos que estar enfocados en tener una vida sana, y no dejar que los malo momentos afecten nuestra salud.
La gran parte de nosotros concebimos lo que significa haber ganado unos cuantos kilos no anhelados y su impacto en nuestra salud. La analogía del sobrepeso siempre termina pasando por nuestras mentes, estemos preparados o no, pero temas como la belleza o el peso corporal siempre son pensamientos que de alguna forma u otra rondan en nuestro día a día.
Siempre se deben tener pensamientos positivos, en vez de malos pensamientos, que en un futuro conlleven a tener sobrepeso. La vida puede dejar de ser importunada y empezar a sentirse más ligera y más libre. Para los que se dejan llevar por sus emociones, perder peso puede ser crítico.
El estado emocional es clave. Utilizar el peso como resguardo del mundo o las emociones puede ser positivo, pero perjudicial a largo plazo. Varias personas utilizan la excusa de tener sobrepeso para evitar ciertas circunstancias, esto consigue ser un comportamiento asimilado para conservarse emocionalmente estable.
No obstante, poseer sobrepeso puede impedirle hacer tantas cosas, puede estorbar con la calidad de su vida, llevar a una muerte temprana y afectar sus relaciones. Puede que no sea cómodo afrontar sus problemas de peso emocionalmente afectados, pero concluyentemente valdrá la pena. (ver artículo: ¿Porque no engordo? )
Por estrés
Durante incontable tiempo se ha pensado que existe una relación entre el estrés a largo plazo y la obesidad. El estrés crónico consigue llevar a “comer con comodidad”, lo que frecuentemente involucra comer en abundancia los alimentos con alto indice de grasa, azúcar y calorías, que, a su vez, consiguen llevar al aumento de peso. Si bien el estrés a corto plazo consigue hacer que un individuo pierda el apetito, el estrés crónico consigue tener un efecto inverso.
El estrés a corto plazo hace que el cerebro segregue una hormona supresora del gusto llamada hormona libertadora de corticotropina. Las señales asimismo se remiten a las glándulas suprarrenales que empujan la obtención de adrenalina, lo que suprime transitoriamente cualquier necesidad de comer como parte de una respuesta de lucha o huida.
Por otra parte, el estrés continuo causa la liberación de una hormona citada cortisol. Esta hormona acrecienta el apetito de un individuo y, si el estrés no disminuye, los niveles de cortisol y apetito se perpetúan en el tiempo.
Diversos estudios en animales han insinuado que el estrés influye en los favoritismos de los alimentos, eligiendo los alimentos ricos en grasa y azúcar, cuando los individuos se hallan estresados física o emocionalmente.
Estos alimentos parecen impedir la actividad cerebral que está implicada en el procesamiento del estrés y la ansiedad, la cual posee el efecto de compensar estas emociones. Conjuntamente a comer en exceso, el estrés puede originar problemas para dormir, un menor deseo de hacer ejercicio y un mayor consumo de alcohol, todos estos, factores que acrecientan la probabilidad de aumento de peso y riesgo para la salud.
Tratamiento para el sobrepeso
El tratamiento para el sobrepeso posee dos objetivos primordiales, eliminar los factores causales, que consiguen ser dificultosos si las causas son de origen emocional o psicológico, y eliminar la abundancia de grasa, al someterse a una modificación en los hábitos de ingesta de alimentos.
El retorno a un peso corporal saludable, mediante la disminución de la ingesta de calorías se lleva a cabo de forma más exitosa bajo supervisión médica. Las dietas que provocan efectos rápidos en la disminución de peso, son de dudosa efectividad, y casi la totalidad de los mismas son perjudiciales para la salud.
La pérdida de peso se logra de forma más productiva, a través del aumento de la actividad física y los cambios básicos en la dieta, como someter ha modificar los hábitos de alimentación inadecuados reemplazandolos por las frutas y los vegetales o por carbohidratos purificados.
Varios medicamentos están destinados para el tratamiento de la obesidad. Dos de ellos son Belviq con clorhidrato de lorcaserina, y Qsymia con fentermina y topiramato. Belviq reduce los antojos, de las personas que padecen obesidad, por alimentos ricos en carbohidratos al incitar la liberación de la serotonina, que normalmente es excitada por la ingesta de hidratos de carbono.
Qsymia beneficia los efectos secundarios de pérdida de peso del topiramato, un medicamento antiepiléptico, y las propiedades vivificantes de la fentermina, son consideradas un método a corto plazo efectivo para la obesidad. La fentermina precedentemente había sido parte de la fenfluramina-fentermina, en una combinación de anti-obesidad que se eliminó del mercado de los Americano en el año 1997 debido al alto riesgo de daño de las válvulas cardíacas incorporado con la fenfluramina.
La obesidad se interviene y trata para reducir los riesgos para la salud producidos por su padecimiento y para optimizar la calidad de vida de la persona. Un evento de control de peso adecuado, comúnmente combina actividad física, dieta sana y cambios en los hábitos diarios.
Otros programas de pérdida de peso, pueden contener consejo psicológico y, en ciertos casos, terapia con medicamentos. Perder peso y conservar el peso ideal o saludable, es muy desafiante porque se demandan cambios en el estilo de vida y la conducta.
Dentro de un régimen de control de peso, lo ideal, es almorzar con una dieta sana y equilibrada. Las dietas de moda y las de alto impacto no son muy efectivas y pueden ser peligrosas. El cuerpo precisa una cantidad minúscula de energía de los alimentos para funcionar normalmente. No se debe emplear una dieta diaria con menos de 1000 a 1200 calorías sin indicación médica.
Las dietas estrictas nunca logran éxito a largo plazo porque una vez que se detiene la dieta, el peso habitualmente regresa. Los planes comerciales para perder peso y las clínicas son negocios triunfantes porque poseen muchos clientes que vuelven.
Dieta
Las dietas de novedad van y vienen, sin embargo algunas, como las dietas bajas en carbohidratos y altas en proteínas y grasas, logran funcionar a corto plazo, pero pueden significar graves peligros para la salud a largo plazo.
En últimas investigaciones, los proyectos de pérdida de peso a largo plazo que mas éxito tuvieron, se basan en restringir la cantidad de calorías que se ingiere y la suma que quema a través del ejercicio y las actividades diarias, en lugar de la constitución real de la dieta.
El ayuno puede trascender en una rápida baja de peso, pero usted pierde masa muscular magra significativa junto con la grasa. Las dietas totalmente líquidas, que deben ser controladas por un médico, pueden utilizarse por un período corto de tiempo, pero estas dietas no brindan un bienestar a largo plazo. Las dietas de moda, que no han tenido buenos efectos en la salud, y debido a la falta de investigaciones medicas validas, no se consideran como saludables para perder peso.
Para perder peso y no recobrarlo, en lugar de pensar en una «dieta», elabore en un plan de alimentación concreto. Un plan que se acomode a sus gustos y prevenciones personales tendrá más probabilidades de producir una pérdida de peso perdurable.
Una dieta equilibrada que restrinja el gasto de calorías puede trabajar bien. Un dietista matriculado puede ayudarlo a hacer un plan de dieta definido basado en su situación individual.
Todas las grasas no son malas, hoy en día sabemos que las grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas suministran aportes para la salud, como ayudar a conservar el corazón saludable. Esto significa que las nueces, las semillas y ciertos tipos de aceites, como el de oliva, el cártamo y la canola, consiguen ser parte de un plan de nutrición sano.
Prevención
La obesidad es una enfermedad crónica que afecta a más y más a niños, adolescentes y mayores. Los profesionales de la salud están advirtiendo la aparición más adelantada de diabetes tipo 2, habitualmente una enfermedad que surge en adultos mayores, padecimientos cardiovasculares y depresión relacionada con la obesidad en niños y adolescentes.
Cuanto más tiempo una persona es obesa, más se exponen los factores de riesgo relacionados con la obesidad. Dadas las enfermedades crónicas y las situaciones relacionadas con la obesidad, y el hecho de que la obesidad es difícil de tratar, la prevención es considerablemente importante.
La razón principal por la que la prevención de la obesidad es tan vital en los niños, es porque se piensa que la posibilidad de que los pequeños obesos se conviertan en adultos obesos, es de alrededor del 20% en niños de cuatro años de edad, y en 80% en adolescentes.
Las personas jóvenes, habitualmente, poseen sobrepeso u obesidad porque no realizan bastante actividad física en conjuntos con los malos hábitos alimenticios. La genética y el estilo de vida también favorecen al grado de peso del niño. Mejorar sus hábitos alimenticios y desarrollar la actividad física juegan un papel importante en la prevención de la obesidad. Por lo que es aconsejable consumir de cinco a seis fracciones de frutas y verduras regularmente.
Una porción de vegetales es una taza de vegetales crudos o media taza de vegetales guisados o jugo de vegetales. Una fracción de fruta es una pieza de fruta chica o mediana, fresca. Prefiera alimentos integrales como el arroz integral y el pan integral. Evite los alimentos altamente procesados creados con azúcar blanca refinada, harina y grasas saturadas.
¿El sobrepeso es una enfermedad?
La Asociación Médica Americana, consideró a la obesidad como una enfermedad en el año 2013 y, como consecuencia, la idea de que la obesidad es producida por una fuerza de voluntad escasa, falta de conducta y malas elecciones empezó a transformarse.
Ese mismo año, el sobrepeso dio de que hablar en los medios académicos y en los principales medios de comunicación mundial. La obesidad ya no era un tema de diálogo disimulado o un tabú, sino que se hablaba de ella en las noticias para que el público la reconociera. Una enfermedad es una condición, que trastorna el funcionamiento normal y se presenta típicamente al aparecer signos y síntomas.
La obesidad se define técnicamente como una «enfermedad crónica, demandante, multifactorial, neuroconductual, en la que un acrecentamiento de la grasa corporal origina la disfunción del tejido adiposo y fuerzas físicas inauditas de la masa grasa, dando como consecuencia derivaciones metabólicas, biomecánicas y de salud psicosocial desfavorables».
Las personas con obesidad poseen una mayor reserva de grasa que no siempre es debida a comer demasiadas calorías o escasear de actividad física. Las personas con obesidad poseen vías metabólicas perjudicadas junto con lo que es la saciedad, la sensación de plenitud, y de estar lleno. Para varios, los esfuerzos para perder peso se hallan con una resistencia del cuerpo a perderlo o una recuperación de peso rápida.
La patología del sobrepeso es vasta y se altera según la causa del aumento de peso. No hay un solo tipo u origen para la obesidad. Los subtipos de obesidad contienen congénitos, inducidos por estrés, dependientes de la menopausia y deficientes en MC4R, por mencionar algunos.
La obesidad, entonces, está relacionada con alteraciones genéticas, anímicas, físicas, metabólicas, neurológicas y hormonales. Está profundamente vinculada con las enfermedades del corazón, la apnea del sueño y algunos tipos de cáncer. La obesidad es una de las enfermedades que consiguen influir en las relaciones sociales e interpersonales.
Relación entre el sobrepeso y tiroides
El sobrepeso es uno de los riesgos de salud más significativos de nuestro tiempo. La prevalencia de la obesidad se ha elevado en todo el mundo desde los años setenta. Según la Encuesta nacional de análisis de salud y nutrición, el sobrepeso afectó al 32% de los adultos entre 2003 y 2004 y logró un pico en los sujetos en la quinta década de su vida.
La obesidad se relaciona con un mayor riesgo de padecer diabetes, dislipidemia, molestia renal, padecimiento cardiovascular, mortalidad por todas las causas y cáncer. Asimismo, la obesidad, fundamentalmente la obesidad central, está vinculada a diversas anomalías endocrinas, entre ellas, la disfunción tiroidea.
Esto no es extraordinario, ya que la hormona T3 normaliza el metabolismo alimenticio y la termogénesis, también desempeña un papel esencial en el metabolismo de la glucosa y los aceites, la ingesta de alimentos y la oxidación de los ácidos grasos.
La disfunción tiroidea está relacionada con cambios en el peso corporal y la constitución física, la temperatura corporal y el gasto energético total. Además, el desarrollo de peso frecuentemente ocurre luego del tratamiento de la disfunción tiroidea.
La evidencia sugiere que las ligeras desviaciones en la función tiroidea, favorecen al desarrollo de la obesidad y la tendencia a ganar peso, aunque esto no ha sido justificado por todos los estudios.
Cualquiera que sea el componente que afecte el aumento o desarrollo del TSH (Hormona) en la obesidad, es difícil diagnosticar a los sujetos obesos que se ven afectados por una falta leve de hormona tiroidea.
Parece sensato sugerir que debe sospecharse del hipotiroidismo en ciertas personas con obesidad, con niveles de TSH levemente aumentados solo después de evaluar los niveles plasmáticos de hormonas tiroideas y auto-anticuerpos tiroideos, y después de haber manifestado evidencia de actividad de hormona tiroidea trastornada a nivel tisular.
Hipotiroidismo
El hipotiroidismo es una enfermedad en la cual la glándula tiroides no puede sintetizar suficiente hormona tiroidea. Dado que la función principal de la hormona tiroidea es «intervenir el metabolismo del cuerpo», es entendible que las personas con esta afección posean síntomas ligados con un metabolismo lento.
Si bien las estimaciones difieren, es posible que cerca de 10 millones de personas en el mundo, o mas, tengan esta particularidad médica habitual. De hecho, hasta un 10% de las mujeres desarrollan cierto grado de insuficiencia de hormona tiroidea.
Hay dos causas muy comunes de hipotiroidismo. El inicial es el resultado de una hinchazón precedente de la glándula tiroides, que deja una gran cantidad de las células de la tiroides dañadas e incapaces de producir suficiente hormona.
La causa más habitual de insuficiencia de la glándula tiroides se denomina como tiroiditis auto-inmune, que es la inflamación de la tiroides producida por el propio sistema inmunitario del paciente.
La segunda causa principal es la amplia variedad de «tratamientos médicos». El tratamiento de básico de la tiroides, es la eliminación quirúrgica de una parte o la totalidad de la glándulas tiroideas.
Si la cantidad total de células operarias de tiroides que quedan en el cuerpo no es suficiente para compensar las necesidades del cuerpo, el paciente padecerá hipotiroidismo. Según la visión común, el hipotiroidismo también es causante de la obesidad. No obstante, vincularlos directamente es controversial.
Los niveles elevados de leptina (hormona) pueden jugar un papel importante en lo que es la hiper-tirotropinemia del sobrepeso y asimismo pueden desarrollar la enfermedad hasta llegar a padecer la auto-inmunidad tiroidea y el hipotiroidismo extremo.
Relación entre el sobrepeso y la hipertensión
La obesidad y los problemas de salud relacionados con ella incitan serias repercusiones físicas para los individuos y también para los centros de salud oficiales. El sobrepeso sigue siendo una de las dificultades de salud pública más desatendidas en todo el mundo, y está relacionada con un aumento de los riesgos médicos, como discapacidades, traumas y muerte.
Las enfermedades cardiovasculares, son la primordial causa de mortalidad en el mundo, fundamentalmente la hipertensión y la diabetes, enfermedades que están todas afiliadas con el sobrepeso.
Aunque la relación entre la obesidad y la hipertensión se ha estudiado en niños y adultos, el mecanismo por el cual la obesidad causa verdaderamente la hipertensión está bajo investigación aun.
El sobrepeso puede definirse como una condición médica crónica y complicada que demanda una comprensión detallada, y mas por los mecanismos que hacen que se desarrolle la hipertensión, para los cuales aun no hay estrategias o procedimientos exitosos. El sobrepeso es un riesgo, ya que puede originar también, diabetes y otras enfermedades como la enfermedad renal.
Conjuntamente, la obesidad origina enfermedades cardiovasculares y renales a través de diferentes mecanismos que son la hipertensión, hiperglucemia, inflamación, dislipidemia y aterosclerosis, son perturbaciones que logran coexistir, principalmente debido al exceso de grasa visceral, que produce un síndrome metabólico y se determinan por la alteración en el metabolismo de las grasas.
Sobrepeso y diabetes
El índice de masa corporal posee una enérgica relación con la diabetes y la resistencia a la insulina. En personas con sobrepeso, se desarrolla la cantidad de ácidos grasos no esterificados, glicerol, hormonas, citoquinas, contrastes pro-inflamatorios y otras sustancias que están involucradas en lo que es el aumento de la resistencia a la insulina.
La diabetes se basa principalmente en el hecho de que las células del páncreas están perjudicadas, y esto promueve una falta de control de la glucosa en la sangre, por lo que debe administrarse insulina para poder controlarla.
Cuando la diabetes progresa se vuelve más difícil tratarla, ya que las células Beta del islote del páncreas se ven afectadas por la resistencia a la insulina. El aumento rápido de peso y la masa corporal son básicos para la formación y el desarrollo de la diabetes tipo 1 y tipo 2.
El sobrepeso y la obesidad se consolidan por una acumulación alta de tejido adiposo en un grado que deterioran la salud física y psicosocial. La obesidad actualmente se define como un problema de salud tanto en los países desarrollados, como en los países en desarrollo.
El sobrepeso y la diabetes están aumentando velozmente en varias naciones del planeta. Esta enfermedad debe contenerse, ya que el control de estas enfermedades implican costos económicos que no todos los países pueden costear, así como los riesgos sociales, la morbilidad, y otros factores que son mas costosos que la misma eliminación de la enfermedad.
La progresiva incidencia de diabetes tipo 2 entre niños y adultos está relacionada con la epidemia de obesidad. Si bien se continúa investigando y estudiando la fisiopatología de la diabetes tipo 1, que es de naturaleza auto-inmune, el mecanismo exacto que origina el aumento en la incidencia de diabetes tipo 1 sigue sin quedar claro, fundamentalmente en los grupos de edad temprana.
El estudio llamado «Diabetes Mondiale», que recolecto datos sobre la diabetes infantil en 112 poblaciones de todo el mundo, manifestó un aumento anual próximo del 3% en la diabetes tipo 1 durante el curso de 1989 al 2000.
Relación entre el sobrepeso y el IMC
Tener sobrepeso es más que un dígito en la escala. Un niño más alto, probablemente, podría pesar más que un niño más bajo y no poseer sobrepeso. Es por eso que los doctores utilizan algo llamado índice de masa corporal, o mejor conocido como IMC, para ayudar a decidir si un niño posee sobrepeso.
El IMC utiliza la altura y el peso de un individuo en un calculo que da como resultado un numero. El doctor busca ese numero en una tabla para ver dentro de que rango se encuentra la persona. El IMC deduce cuánta grasa corporal posee la persona. Debido a que el músculo pesa más que la grasa, una persona musculosa consigue tener un IMC alto, pero no realmente relacionado con grasa corporal. Asimismo, es posible que alguien tenga un IMC bajo o ideal, pero que tenga excesiva grasa corporal.
El sobrepeso con respecto al IMC, se relaciona en un análisis físico y la historia del paciente, es decir, costumbres de alimentación y ejercicio. El análisis del índice de masa corporal no mide exactamente la grasa corporal de la persona, pero es una herramienta ventajosa para valorar, en que estado de salud esta la persona y si posee sobrepeso u obesidad.
Un IMC de 18.5 a 24.9 esta dentro del rango sano. El IMC se conjetura utilizando kilogramos y metros, en lugar de libras y pulgadas/pies. Hay que tener en cuenta 1 libra corresponde a 0.45 kg y 1 pulgada corresponde a 0.0254 metros.
El IMC se calcula de la siguiente manera:
IMC = peso corporal (kg) ÷ altura² (m)
https://www.youtube.com/watch?v=hzhiX6fJoVI
Tabla
Varias asociaciones clasifican el IMC según el riesgo agrupado para desarrollar dificultades de salud:
IMC Menor de 18.5, corresponde a un Bajo peso y se debe aumentar.
IMC 18.5 a 24.9, corresponde a un peso normal, y debe mantenerse.
IMC 25.0 a 29.9, corresponde a un exceso de peso y debe disminuirse.
IMC 30.0 a 34.9 corresponde a la Clase obesa I y es Alto.
IMC 35.0 a 39.9, corresponde a la Clase obesa II y es Muy alto.
IMC 40 o más alto, corresponde a la Clase obesa III y es extremadamente alto.
La programación anterior no aplica para personas menores de 18 años, mujeres embarazadas o mujeres que en periodo de lactancia. Para las personas de 65 años o más, la condición «normal» es más alta, empieza levemente por encima de 18.5 y se desarrolla al rango de «sobrepeso».
Los médicos, también consiguen utilizar otras medidas, como la dimensión de la cintura, para valorar los riesgos para la salud relacionados con el exceso de grasa abdominal. Cuando el IMC y el grosor de la cintura demuestran un alto riesgo de problemas de salud, se deben realizar otras pruebas adicionales. Las variaciones de las tablas de IMC, que sirven para verificar el peso corporal ideal en los adultos, están visibles en Internet.
Sobrepeso y embarazo
El sobrepeso desarrolla el riesgo de aparición las siguientes dificultades durante el embarazo:
Pérdida del embarazo: las mujeres obesas poseen un mayor riesgo de pérdida del embarazo o aborto espontáneo, en balance con las mujeres de peso estándar.
Defectos de nacimiento: los bebés nacidos de mujeres obesas poseen un mayor peligro de tener enfermedades y discapacidades, como defectos cardíacos y defectos en el tubo neural.
Dificultades con las pruebas de diagnóstico: poseer excesiva grasa corporal puede hacer que sea dificultoso ver ciertas dificultades con la anatomía del bebé en un análisis de ultrasonido. El control de la frecuencia cardíaca del bebé durante el parto puede ser más complicada si usted posee sobrepeso.
Macrosomía: en esta situación, el bebé es más grande de lo normal. Esto puede desarrollar el riesgo de que el bebé se lastime durante el parto. Por ejemplo, el hombro del bebé consigue atorarse durante el parto. La macrosomía, acrecienta el riesgo de cesárea. Los bebés que nacen con excesiva grasa corporal poseen una mayor probabilidad de ser obesos más delante en la vida.
Nacimiento prematuro: los problemas relacionados con el sobrepeso de una mujer, como la Preeclampsia, conllevar a que el bebe tenga un nacimiento prematuro. Esto simgnifica que el bebé es traído al mundo antes de lo esperado por una razón médica.
Los bebés precoces no están tan desarrollados como los bebés que nacen luego de las 39 semanas de embarazo. Como efecto, poseen un mayor riesgo de dificultades de salud a corto y largo plazo.
Las mujeres con sobrepeso y obesas poseen labores de parto más largas que las mujeres de peso estándar. Puede ser más difícil ver al bebé durante el parto. Por estas dificultades, la obesidad durante el embarazo puede hacer que los médicos prefieran practicar un parto por cesárea. Si se elige un parto por cesárea, los peligros de infección, sangrado y otras dificultades son mas peligrosos para una mujer con sobrepeso, que para una señora de peso estándar.
https://www.youtube.com/watch?v=2yh-H9L_6nQ
Diferencias entre sobrepeso y obesidad
Tanto el sobrepeso como la obesidad se definen como una gran acumulación de grasa que puede afectar la salud de la persona. El índice de masa corporal es un índice de peso que se relaciona con la estatura que se usa comúnmente para clasificar el sobrepeso en adultos.
El IMC se define matemáticamente como el peso de una persona en kilogramos dividido por el cuadrado de su altura en metros. Para los adultos, la OMS diferencia el sobrepeso y la obesidad de la siguiente forma:
El sobrepeso es un IMC mayor o igual a 25.
La obesidad es un IMC mayor o igual a 30.
El IMC suministra la medida más concreta a nivel de población del sobrepeso y la obesidad, ya que es la equivalente para ambos sexos y para todas las edades de adultos. No obstante, debe considerarse una guía de apoyo porque puede ser que no todos los individuos tengan el grado de sobrepeso que indica el IMC. Para los niños, la edad debe ser tomada en cuenta al definir si tiene sobrepeso u obesidad.
En el año 2016, cerca de 41 millones de niños menores de 5 años poseían sobrepeso u obesidad. Una vez considerado como una dificultad de un país de altos ingresos, el sobrepeso y la obesidad están ahora en aumento en los países de bajos y medianos recursos, fundamentalmente en entornos urbanos.
En África, la cantidad de niños menores de 5 años con sobrepeso se ha desarrollado en casi un 50% desde el año 2000. Casi la mitad de los niños menores de 5 años que tenían sobrepeso u obesidad en 2016 vivían en Asia.
El sobrepeso y la obesidad, así como sus padecimientos no transmisibles relacionados, se pueden advertir en gran medida. Los entornos y las colectividades de apoyo son esenciales para determinar las opciones alimenticias de las personas, al preferir los alimentos más sanos y la actividad física habitual, que son las mejor opción para prevenir el sobrepeso y la obesidad.
Sobrepeso en la mujer
La certeza de los efectos desfavorables de la obesidad en la salud de la mujer es angustiosa e indiscutible. La obesidad, fundamentalmente la obesidad abdominal, es esencial en el síndrome metabólico y está enormemente relacionada con el síndrome de ovario poliquístico en las mujeres.
Las mujeres obesas están especialmente propensas a la diabetes, y la diabetes, a su vez, coloca a las mujeres en un riesgo alto de padecer enfermedades cardiovasculares. La obesidad desarrolla esencialmente el riesgo de varios cánceres significativos en las mujeres, fundamentalmente el cáncer de mama posmenopáusico y el cáncer de endometrio.
El sobrepeso y la obesidad se relacionan con una alta mortalidad por todas las causas que conlleva esta enfermedad, tanto en hombres como en mujeres, y el peligro de muerte se desarrolla con el aumento de peso. La obesidad en las mujeres se relaciona con alteraciones en el ciclo reproductivo, provocando una disminución de la fertilidad, así como con un mayor riesgo de síndrome de ovario poliquístico y ovulación infrecuente.
Las mujeres con sobrepeso, que poseen el «Síndrome de ovario poliquistico», tienen una tendencia a la resistencia de insulina y son propensas a desarrollar diabetes, especialmente en los años de edad madura.
Además, la propensión a los trastornos menstruales y ováricos relacionados con la obesidad, pueden llevar a un mayor riesgo de cáncer de ovario, de mama y de endometrio. De hecho, ahora está explicito que la ocurrencia de todos los cánceres ginecológicos se desarrolla al aumentar el IMC.
En el actual siglo, la obesidad se ha reconciliado en una epidemia dentro del mundo, donde se aprecia que más de 1.500 millones de adultos poseen sobrepeso. Se cree que casi 300 millones de mujeres son clínicamente obesas.
Tener sobrepeso, causa problemas de salud significativos no solo para las personas, sino además para las familias y las comunidades que han de asumir el costo de administrar las afecciones médicas relacionadas, frecuentemente manejando una parte significativa del presupuesto total de salud. El exceso de adiposidad posee consecuencias específicas para las mujeres y para la salud productiva.
Menopausia
Existen numerosas preocupaciones sobre la menopausia entre las mujeres, y la prevención a un aumento en el peso corporal es una de las más significativas.
El papel de los estrógenos en la regulación del balance energético y el resultado de las hormonas sexuales en el metabolismo del tejido adiposo y otros miembros, son procedimientos a destacar en lo que respecta a la relación del sobrepeso con la menospausia. La intención primordial de toda persona es hacer entender que deben siempre alejarse de los estilos de vida poco sanos.
La menopausia suele ser causa de varias preocupaciones entre las mujeres. Una de los más significativas es el miedo al aumento de peso. De hecho, es bien sabido que la obesidad y el síndrome metabólico se hallan en mujeres en esta etapa de su vida, tres veces más que antes de la menopausia.
En la menopausia surgen muchos síntomas angustiantes en la vida de una mujer, como sofocos, perturbaciones del estado de ánimo, trastornos del sueño e infecciones periódicas del tracto urogenital.
Conjuntamente, en este momento aparecen muchos problemas metabólicos, como aumento del peso corporal, resistencia a la insulina y variaciones de la glucosa y del metabolismo de los lípidos. En resultado, aumenta el riesgo de desarrollo de diabetes tipo 2, osteoporosis, padecimientos cardiovasculares y oncológicos.
Sobrepeso en niños
La obesidad infantil se ha transformado en un problema significativo en muchos países. El exceso de peso en niños, frecuentemente se relaciona al bajo auto-estima y a sufrir problemas emocionales, psicológicos y sociales. La obesidad consigue tener un impacto negativo en la instrucción de un niño y en el estado socio-económico futuro.
En 2004, cerca de nueve millones de niños en el mundo, mayores de seis años, entre ellos también los adolescentes, poseían sobrepeso u obesidad, los términos se manejaban indistintamente para simbolizar el exceso de grasa en niños. Además, en los años 80 y 90, la prevalencia de la obesidad se había más que multiplicado entre los niños de 2 a 5 años y de 6 a 11 años.
Para 2015, el 20% de los niños a nivel mundial, de 6 a 19 años tenían sobrepeso. Estimaciones agregadas en algunas zonas rurales del país revelaron que más del 30% de los niños en edad escolar sufrían de obesidad.
Aumentos similares se vieron en otras partes del mundo. En el Reino Unido, por ejemplo, la prevalencia de gordura entre los niños de 2 a 10 años se desarrolló un 10% en 1995 al 14% en 2003, y los datos de un estudio consumado en 2007 mostraron que el 23% de los niños de 4 a 5 años y el 32% de los niños de 10 a 10 años 11 poseían sobrepeso u obesidad.
Para el 2016, según datos de la OMS, en toda la tierra, cerca de 41 millones de niños de 5 años o menos tenían sobrepeso o eran obesos. En 2005, la Academia Estadounidense de Pediatría designó a la obesidad, como la epidemia pediátrica del nuevo milenio.
Los niños con sobrepeso y obesos fueron determinados cada vez más con hipertensión arterial, colesterol alto y diabetes mellitus tipo II, condiciones que se observaban solamente en adultos. Además, los niños con sobrepeso sufren de fracturas en los huesos y dificultades con las articulaciones con más periodicidad que los niños con peso estándar.
Sobrepeso en bebes
El peso ha sido significativo desde el instante en que se nace. Tal vez inclusive sabes cuál era tu peso al nacer. Gran parte de los recién nacidos pesan entre 6 y 9 libras, pero unos pueden pesar más y algunos menos.
El médico siempre pretende verificar que la persona posea un peso saludable porque pesar demasiado, o muy poco, puede ser una dificultad. Por ende el peso en los bebes es muy delicado, y siempre debe tomarse en cuenta.
Se espera que el crecimiento, el progreso, y el peso sean asuntos que se noten en los exámenes médicos mensuales, que sirven para inspeccionar la salud del bebe. Pero en estos días, el sobrepeso es más habitual que el bajo peso. Más niños y adolescentes poseen problemas de peso actualmente, con respecto a años anteriores.
Cuando las personas conversan de sobrepeso u obesidad, se refieren a que alguien posee más grasa corporal de la que debería. Todos poseemos algo de grasa corporal, pero la excesiva grasa puede llevar a dificultades de salud.
Los niños con sobrepeso llegan a tener dificultades para moverse libremente, y asimismo conservar las amistades con sus amigos en el patio de recreo. Estos pueden ser centro de burlas o sentirse mal consigo mismos.
Panorama del sobrepeso en el mundo
En los últimos años, el número de personas con sobrepeso en los países del primer mundo ha aumentado paulatinamente, tanto que la Organización Mundial de la Salud ha nombrado como epidemia a la obesidad.
En los Estados Unidos, el 69% de la plaza adulta posee sobrepeso o es obesa. En Canadá, los datos de encuestas exponen que el 40% de los hombres y el 27% de las mujeres poseen sobrepeso, y el 20% de los hombres y el 17% de las mujeres tienen obesidad.
Conforme con un informe divulgado a inicios de este año del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud, con sede en la Universidad de Washington en Seattle, más de 600 millones de adultos y 100 millones de niños, tienen sobrepeso.
Eso simboliza alrededor del 5% de todos los niños y el 12% de todos los adultos. De los 20 países más desarrollados del mundo, Egipto posee el mayor problema de peso.
Los Estados Unidos, donde se afirma que el 33% de la población tiene sobrepeso, en realidad es el número 18 en la lista, mientras que el Reino Unido con un 27% es el número 43.
En el otro extremo de la escala, vencen los países asiáticos y africanos. Menos del 2% de las poblaciones de Etiopía, Bangladesh, Nepal, Madagascar, Vietnam, la República Democrática del Congo y la India se reflexionan con sobrepeso.
México
La persistencia de la obesidad en México se ha acentuado sustancialmente desde los años 1980, y actualmente el sobrepeso afecta a más del 30% de la población adulta.
Se presume que para 2050, la cantidad de hombres y mujeres obesos en México se acrecentará a 54% y 37%, respectivamente, y probablemente las personas serán más obesas, que con sobrepeso. El aumento en las tasas de obesidad se ha relacionado primariamente con un mayor gasto de alimentos altos en calorías y un estilo de vida más estacionario.
El sobrepeso en México es un fenómeno respectivamente reciente, que se ha divulgado desde la década de 1980 con la entrada de alimentos procesados en gran porción, provenientes del mercado alimenticio mexicano.
Anteriormente de este problema de salud, los problemas dietéticos básicamente tenían que ver con la desnutrición y la escualidez, lo cual sigue siendo un problema en diferentes partes del país. Siguiendo las tendencias ya en curso en otras partes del planeta, los mexicanos han preferido a los granos integrales y vegetales habituales en favor de una dieta con más valores de origen animal, más grasa y más azúcar, gran parte de la cual es resultado de los alimentos procesados.
España
España es uno de los países desarrollados donde la obesidad está progresando muy ágilmente y, a pesar de una dieta que se considera normal, los niños españoles frecuentemente poseen un peso descomunal. Los cálculos más recientes de la Organización Mundial de la Salud, citaron a millones de mayores con sobrepeso y más de 300 millones como obesos.
A la luz de estos dígitos progresivos, ha habido una propensión para hallar el vínculo entre la obesidad y los componentes sociales que lo convierten en un problema tan común, pero con cada investigación se hace más claro que la falta de sueño, es un factor significativo para el sobrepeso.
Una investigación ejecutada por el hospital Mar de Barcelona manifestó que el 80% de los hombres y el 55% de las mujeres poseerán sobrepeso para 2030. Si la tendencia actual se extiende, los investigadores subrayan que, dentro de 11 años, más de 27 millones de personas en España poseerán sobrepeso.
En los hombres, el exceso de peso es más tradicional hasta los 50 años. A partir de los 50 años, la obesidad se desarrolla entre las mujeres. Estas son dificultades que están básicamente relacionadas con el metabolismo hormonal. Desde cierta edad, es más difícil para las mujeres poder controlar su peso.
Argentina
En Argentina, el sobrepeso, al igual que otros países, se ha transformado en un serio problema para la salud pública. A partir de esta realidad, se han formado diferentes tipos de propuestas y regímenes, que están destinados a la prevención y disminución del sobrepeso, la obesidad y las enfermedades asociadas. Estas medidas contienen leyes, valores, guías prácticas, planes y proyectos.
La obesidad en Argentina es una un padecimiento de salud cada vez más común en la población, y los funcionarios de salud publica, aseguran que es una de las primordiales causas de muertes que pueden ser prevenibles en Argentina. Conforme con la ONU, la prevalencia del sobrepeso entre adultos en Argentina estuvo en un 30% en 2008.
El Plan Nacional Argentina Saludable, plantea llevar a cabo labores específicas a nivel poblacional para batallar los primordiales factores de riesgo de enfermedades no transmisibles (ENT), como por ejemplo una dieta poco saludable y el sedentarismo.
Este plan provoca acciones tendentes al desarrollo de una nutrición saludable y una vida activa mediante la creación de ambientes que promuevan la actividad física y una alimentación sana, rica en frutas y verduras, baja en sodio y en grasas trans.
Estados Unidos
En cuanto a lo que está causando un aumento significativo de peso de Estados Unidos, no hay respuestas concluyentes. Los estudios científicos frecuentemente llegan a conclusiones complicadas, lo que significa que existen varias teorías, pero la poca evidencia que se tiene, apunta a dos causas que la gran parte de las personas ya desconfiaba, las cuales son mucha comida y poco ejercicio.
El norteamericano promedio consumió casi 20% más calorías en el año 2000 que en 1983, gracias, en parte, a un apogeo en el consumo de carne. Ahora, cada estadounidense guarda una cifra de 195 libras de carne por año, en balance con las 138 libras en los años cincuenta. El gasto de grasas agregadas de igual forma se disparó en cerca de dos tercios durante el mismo tiempo, y el consumo de granos se desarrolló un 45% desde 1970.
El sobrepeso en los Estados Unidos es un inconveniente de salud significativo, que deriva en cuantiosas enfermedades, concretamente un mayor riesgo de padecer cáncer, dolencia arterial coronaria, diabetes tipo 2, accidentes cerebro-vasculares y costos financieros significativos. Si bien varios países industrializados han cursado aumentos similares, las tasas de sobrepeso en los Estados Unidos no son las mas elevadas del plata, mas sin embargo es el líder en el continente americano.
Chile
El sobrepeso en Chile es una dificultad de salud cada vez mayor entre los funcionarios de salud que aseguran, que es una de las primordiales causas de muertes prevenibles en Chile. Según Forbes, Chile conquista el puesto 23 en la lista de 2007 de los países más obesos, con una proporción del 65% de los individuos, según diversas poblaciones del país.
La evidencia indiscutible que relaciona el sobrepeso con las causas principales de muertes precoces como la diabetes, las enfermedades cardíacas y varios tipos de cáncer es abrumadora en Chile.
Las causas del sobrepeso, principalmente el exceso de azúcar y las grasas saturadas en la dieta, son concluyentes en Chile. Hasta finales de la década de 1980, la desnutrición era la principal enfermedad en el país, y varios chilenos de la clase baja tenían bajo peso. No obstante, el desarrollo económico ha impulsado una crisis de sobrepeso, que el gobierno está tomando medidas para solucionar.
Sin embargo, actualmente debido a las influencias en medios sociales, Chile esta experimentando un aumento del interés por parte de los jóvenes y jóvenes adultos, a desarrollar actividades físicas así como a tener una dieta baja en calorías, razón por la cual en un corto periodo de tiempo el país podría experimentar un gran descenso en los niveles de sobrepeso de su población.
